Break dance: lo que debes saber sobre este arte urbano y sus conexiones con la cultura chilena

El break dance, una forma de danza urbana que combina movimientos acrobáticos, ritmo y actitud, nacida en las calles del Bronx en los años 70. También conocido como b-boying, no es solo un estilo de baile: es una cultura completa que incluye música, grafiti, DJ y la actitud de decir "yo existo aquí". En Chile, el break dance no se quedó en los parques de Santiago. Se instaló en plazas, ferias barriales y hasta en competencias escolares. Lo ves en La Florida, en Valparaíso, en Concepción: jóvenes con zapatillas gastadas y mochilas llenas de rutinas, practicando al amanecer o después del colegio, porque en ese momento, el suelo es su escenario y el ritmo, su voz.

Este arte no vive en el vacío. Se conecta con otras cosas: con el Metro de Santiago, que extendió sus horarios para llevar a jóvenes a conciertos de Kendrick Lamar, y también para que los b-boys y b-girls puedan moverse después de sus ensayos nocturnos. Se relaciona con el Canto a lo Poeta, porque ambos son manifestaciones orales y corporales que resisten la homogenización cultural, y ambos buscan ser reconocidos por la UNESCO como patrimonio vivo. Y también se cruza con el fútbol juvenil, porque como en los equipos de fútbol, en el break dance hay líderes, técnicos, rivalidades, y jóvenes que se salvan del ocio o la violencia gracias a un grupo que los acepta tal como son.

En Chile, no hay un campeonato nacional de break dance con televisoras, pero sí hay comunidades que organizan batallas en plazas, que enseñan gratis a niñas en barrios populares, que graban videos en el puente Bío Bío y los suben a redes. No necesitan patrocinadores. Necesitan espacio, respeto y un buen sonido. Lo que encuentras aquí no son artículos sobre estrellas internacionales. Son historias reales: un chico de La Cisterna que ganó una batalla contra un campeón de Medellín, una chica de Antofagasta que creó un taller para niñas con discapacidad, un festival en Valdivia que duró tres días y nadie lo anunció en los medios. Son las historias que no salen en los titulares, pero que construyen el verdadero break dance.

Lo que sigue no es una lista de noticias sobre deportes o entretenimiento. Es un mapa de cómo el break dance se mueve en Chile: en las calles, en las escuelas, en las redes, en las vidas de quienes lo viven. No hay fórmulas mágicas, ni técnicas secretas. Solo personas, ritmo y coraje. Y eso, al final, es lo que importa.

El breaking es el único deporte nuevo que debutará en los Juegos Olímpicos de París 2024. Surgido en Nueva York en los años 60 y popularizado en los 80, se convirtió en deporte competitivo gracias a Red Bull y fue anunciado oficialmente como deporte olímpico en 2021. Las competiciones tendrán lugar el 9 y 10 de agosto, con B-Girl Nicka y B-Boy Victor como favoritos para el oro.