La Oreja de Van Gogh, un grupo de rock alternativo español formado en San Sebastián en 1996, que fusiona melodías pegadizas con letras profundas sobre emociones humanas. También conocido como LOVG, se convirtió en uno de los sonidos más reconocibles de la música en español de los años 2000 y 2010. No fue solo un grupo de moda: sus canciones se escuchaban en los coches, en las fiestas y en los momentos de soledad. Canciones como El 7 de septiembre, El último vals o La niña que llora en tu fiesta no solo sonaban en la radio, sino que se volvieron himnos para quienes buscaban palabras para lo que sentían pero no sabían decir.
Lo que los hizo únicos fue su capacidad para conectar sin gritar. No necesitaban efectos ni ruidos para mover a la gente. Con una voz suave de Amaia Montero y guitarras que parecían susurros, lograron que millones se identificaran con sus letras. Y aunque Amaia se fue en 2014, el grupo siguió, con nuevos integrantes, manteniendo su esencia. El público no los abandonó. Porque cuando escuchas Quisiera ser o Me gusta, no estás escuchando a un grupo. Estás escuchando un pedazo de tu propia historia.
La Oreja de Van Gogh no es solo música. Es una memoria colectiva. Es el sonido de los primeros amores, de las despedidas, de los viajes en tren con los audífonos puestos. Es el grupo que acompañó a muchos en sus años de instituto, en sus primeros trabajos, en sus caídas y en sus reconstrucciones. Hoy, sus canciones siguen siendo reproducidas en playlists, en conciertos al aire libre y en los momentos en que necesitas sentir que alguien entiende lo que callas.
En esta colección encontrarás noticias sobre sus giras, sus nuevos lanzamientos, las reacciones del público y cómo sigue vivo su legado, incluso cuando no están en primera plana. No es un grupo del pasado. Es un sonido que aún resuena.