Un taller, una actividad práctica donde se aprende haciendo, no solo escuchando. Es una forma directa de adquirir habilidades, compartir conocimiento y conectar con otros. También conocido como curso práctico, un taller no se limita a la escuela o el trabajo: puede ser una reunión de vecinos arreglando bicicletas, un grupo de jóvenes aprendiendo a usar IA para arte, o un evento cultural como el Canto a lo Poeta que se llevó al Metro de Santiago para preservar una tradición oral. Lo que los une es la acción: no se trata de teoría, sino de hacer, probar, equivocarse y mejorar juntos.
Los talleres no son solo para aprender a coser o soldar. Hoy en día, abarcan desde formación laboral hasta actividades comunitarias que responden a necesidades reales. En Chile, por ejemplo, se han usado para enseñar a familias a prevenir incendios, como cuando se instalaron cámaras con IA en el Sky Costanera, o para capacitar a jóvenes en deportividad con la tarjeta verde en fútbol juvenil. También están en la cultura: la Feria de Santos en Potes no es solo un mercado, es un taller viviente de tradiciones medievales, gastronomía y arte local. Y en el ámbito social, el desalojo de la toma Dignidad en La Florida no solo fue un acto de autoridad, sino una señal de que las comunidades necesitan talleres de inclusión, no solo de control.
Lo que ves en esta colección no son solo notas de prensa. Son historias de personas que se reúnen para aprender, transformar o resistir. Hay talleres que cambian vidas: como los que impulsan la movilidad entre fondos de pensiones, o los que permiten que un primo y su pariente disputen una final histórica de tenis. También hay talleres invisibles: los que se hacen en las redes, en los conciertos de Milei, en las protestas de la Generación Z contra las pensiones. Todos tienen un propósito: convertir información en acción. Aquí encontrarás cómo los talleres aparecen en el fútbol, la política, la cultura y hasta en los sistemas de metro. No importa si es un taller de tenis, de poesía o de supervivencia urbana: lo que importa es que alguien se animó a hacerlo, y otros se unieron.