Una tormenta eléctrica, un fenómeno atmosférico que combina relámpagos, truenos y lluvia intensa. También conocida como temporal eléctrico, es más que un espectáculo visual: es un evento que puede cortar la luz, dañar equipos electrónicos y poner en riesgo la vida si no se toman precauciones. En Chile, especialmente en la Región Metropolitana y el sur, estas tormentas se vuelven frecuentes en primavera y verano, cuando el aire cálido se encuentra con masas de aire frío desde el Pacífico.
Lo que muchos no saben es que una tormenta eléctrica, se origina por la separación de cargas eléctricas dentro de nubes de tormenta. Relámpago es la descarga visible, y el trueno es el sonido que produce el aire al calentarse instantáneamente. No es magia: es física pura. Y en zonas como Santiago, donde hay muchos edificios altos y redes eléctricas antiguas, una sola descarga puede dejar sin luz a miles. El Senapred, el sistema nacional de prevención de desastres, monitorea estas tormentas con sensores y alertas en tiempo real, especialmente en áreas con riesgo de aluviones o incendios, como La Florida o Valparaíso. Por eso, cuando escuchas que hay una tormenta eléctrica en camino, no es solo un aviso meteorológico: es una señal para desconectar aparatos, alejarte de ventanas y evitar usar el celular conectado a la corriente.
Lo que ves en las noticias —como el simulacro de tsunami en Valparaíso o las cámaras de IA en Sky Costanera— no son eventos aislados. Todos están conectados con cómo Chile se prepara para fenómenos climáticos extremos. Las tormentas eléctricas no son solo ruido y luz: son parte de un sistema más grande de riesgos naturales que afectan desde el Metro de Santiago hasta las comunas rurales. En esta colección, encontrarás noticias reales de cómo estas tormentas impactan la vida cotidiana: desde cortes de energía hasta alertas de emergencia, pasando por cómo se reaccionó en La Florida o Macul cuando el clima se descontroló. No se trata de predecir el futuro, sino de entender lo que ya está pasando.