George Kirby brilla en la lomita y pone a Seattle en la pelea
¿Quién lo detiene? George Kirby, el lanzador derecho de los Seattle Mariners, dio una clase magistral desde el montículo y silenció por completo a los Baltimore Orioles en Camden Yards. Kirby estuvo intocable durante siete entradas, permitiendo apenas tres hits y repartiendo siete ponches, todo sin regalar una sola base por bolas. Con su sólido desempeño, volvió a bajar su efectividad a 3.71, la mejor marca que ha tenido en toda la temporada y por primera vez debajo de 4.00. Así, Kirby se coloca como uno de los brazos más confiables en la rotación de Seattle.
Aunque Baltimore buscó formas de inquietarle, Kirby no perdió el control en ningún momento. Se encargó de retirar a los últimos seis bateadores que enfrentó y, en el tramo más crítico del duelo, ni siquiera permitió una amenaza seria. Los Orioles terminaron descifrando muy poco y su ofensiva, normalmente peligrosa en casa, fue totalmente anulada.
Un ataque justo y un bullpen intratable aseguran la victoria
El partido se decidió por detalles. La única anotación llegó en la cuarta entrada: Randy Arozarena se metió en bases y, cuando Josh Naylor tuvo su turno, soltó un batazo sencillo hacia el jardín derecho para llevarlo a la registradora. Con cinco imparables totales y una producción limitada, los Mariners capitalizaron al máximo esa oportunidad frente a Dean Kremer, que poco tuvo que reprocharse. Kremer lanzó ocho entradas, ponchó a seis y solo permitió esa carrera, pero cargó con la derrota porque el bateo de Baltimore nunca respondió.
El relevo de Seattle hizo el resto. Eduard Bazardo enfrentó el octavo episodio y sacó dos outs claves, mientras que Gabe Speier entró frío para retirar a Jeremiah Jackson en una sola bola. Andrés Muñoz, en modo cerrador de lujo, se despachó el noveno episodio perfecto para firmar su salvamento número 28 del año, confirmando la solidez del bullpen. George Kirby y la defensa hacen que Seattle ya presuma de su cuarta victoria 1-0 desde julio y su noveno partido con la portería en cero durante el campeonato.
Este triunfo toma otro brillo porque igualó la cima de la División Oeste de la Liga Americana. Los Mariners tienen ahora el mismo registro que los Astros de Houston (67-53), lo que presiona aún más la última parte de la temporada. Por el lado de Baltimore, el panorama es complicado: con récord de 53-66, la distancia respecto al líder Toronto se estira a 16,5 juegos, casi inalcanzable a estas alturas.
Seattle demuestra con hechos que no piensa ceder. El béisbol tiene estas historias, donde el pitcheo oportuno y la defensa pueden opacar por completo cualquier artillería rival, incluso en diamantes tan tradicionales como el Camden Yards de Baltimore.