Equinoccio de primavera: qué es, cuándo ocurre y por qué importa en Chile

El equinoccio de primavera, el momento exacto en que el Sol cruza el ecuador terrestre, marcando el inicio oficial de la primavera en el hemisferio sur. También conocido como equinoccio de septiembre, este fenómeno astronómico no es solo un cambio de calendario: es un punto de giro en la naturaleza, la luz y hasta en tu rutina diaria.

En Chile, el equinoccio de primavera suele ocurrir entre el 20 y el 23 de septiembre. Ese día, el día y la noche duran exactamente 12 horas en casi todo el planeta. No es un detalle menor: después de este momento, los días se hacen más largos y la luz del sol llega con más intensidad, especialmente en la Región Metropolitana y el norte. Esto no solo afecta a las plantas y los animales, sino también a tu ánimo, tu sueño y hasta tu consumo de energía. La gente empieza a salir más, los parques se llenan, y las actividades al aire libre cobran vida. Es el momento en que la naturaleza reacciona, y nosotros, sin darnos cuenta, seguimos su ritmo.

Este fenómeno no ocurre por casualidad. Está ligado al eje inclinado de la Tierra, un ángulo de 23.5 grados que, junto con su órbita alrededor del Sol, crea las estaciones. Sin esta inclinación, no habría primavera, verano ni otoño como los conocemos. Y aunque el solsticio, el día más largo o más corto del año, también marca cambios importantes, el equinoccio es el que sincroniza el reloj biológico de millones de seres vivos. En Chile, donde la variación climática entre norte y sur es enorme, el equinoccio actúa como un punto de referencia común: desde el Atacama hasta la Patagonia, todos experimentamos el mismo cambio en la duración de la luz.

Y no es solo cuestión de astronomía. El equinoccio de primavera tiene raíces culturales profundas. Desde tiempos prehispánicos, pueblos como los mapuches y los atacameños celebraban este momento como un renacer. Hoy, muchas escuelas, comunidades y centros culturales lo recuerdan con actividades al aire libre, talleres de astronomía o simplemente con un paseo al atardecer. En un país donde el cambio climático está acelerando los patrones climáticos, entender este ciclo natural es más importante que nunca. ¿Estamos preparados para los efectos de una primavera más temprana? ¿Cómo afecta esto a la agricultura en el Maule o a la biodiversidad en Valdivia? Estas preguntas no son teóricas: están en los datos que recoge Senapred, en los informes del Ministerio de Agricultura y en las observaciones de los vecinos que ven cómo florecen sus árboles antes de lo normal.

Lo que encontrarás aquí no son solo artículos sueltos. Es una colección de historias reales que giran en torno a este fenómeno: desde cómo el Metro de Santiago ajusta sus horarios para los eventos de primavera, hasta cómo las cámaras de IA en el Sky Costanera detectan incendios más rápido gracias a la sequía que sigue al equinoccio. Verás cómo el clima influye en el fútbol, en las protestas urbanas, en los conciertos y hasta en las decisiones de las AFP. Porque cuando el sol se alinea con el ecuador, nada queda igual. Y tú, como lector, estás en el centro de ese cambio.

La primavera chilena arranca el 22 de septiembre de 2025 con el equinoccio y se extiende hasta noviembre. Las temperaturas suben, los días se alargan y la lluvia disminuye, creando condiciones ideales para el turismo y actividades al aire libre. Regiones como el desierto de Atacama y la Patagonia se vuelven puntos destacados. Además, la temporada coincide con fiestas patrias y otros feriados nacionales.