Venezuela, un país sudamericano que ha sido centro de atención global por su profunda crisis política, económica y social. También conocido como República Bolivariana de Venezuela, ha visto cómo su inflación, escasez de alimentos y colapso de servicios públicos han forzado a millones a salir del país. Lo que empezó como una crisis interna se convirtió en un fenómeno regional: casi 7 millones de venezolanos han emigrado desde 2015, muchos hacia Colombia, Perú, Chile y Ecuador. Esta migración masiva ha cambiado la demografía de ciudades enteras y ha puesto presión sobre sistemas de salud, educación y empleo en los países receptores.
La Venezuela de hoy no es solo un tema de política interna. Es un caso de estudio en cómo una economía dependiente del petróleo puede colapsar, cómo las sanciones internacionales afectan a la población civil, y cómo la polarización política lleva a la desconfianza en las instituciones. Aunque el gobierno sigue controlando medios y recursos, la realidad cotidiana —la fila para comprar pan, la falta de medicinas, el apagón en Caracas— es lo que realmente define al país. Y eso lo sienten también los que se fueron: en Chile, por ejemplo, comunidades venezolanas han formado cooperativas, restaurantes y hasta grupos de apoyo psicológico, convirtiendo su dolor en resistencia.
Las relaciones con América Latina son clave. Países como México, Colombia y Argentina han sido refugio, pero también han exigido respuestas. Mientras algunos gobiernos reconocen a la oposición como legítima, otros mantienen relaciones diplomáticas con Caracas. Y en el fútbol, aunque no lo parezca, Venezuela también ha tenido su momento: jugadores como Salomón Rondón o Yeferson Soteldo han brillado en ligas de Brasil y Argentina, convirtiéndose en símbolos de orgullo para quienes dejaron su tierra.
En esta colección de noticias, no encontrarás discursos políticos vacíos. Aquí hay hechos reales: desalojos por crisis humanitaria, migrantes que construyen vida en Santiago, deportistas venezolanos que compiten bajo otras banderas, y cómo los cambios en la economía regional impactan directamente en las familias que quedaron atrás. Verás cómo una crisis en un solo país puede tener olas que llegan hasta el Metro de Santiago o el Estadio Monumental. No es solo geopolítica. Es vida, es dolor, es lucha. Y es algo que no puedes ignorar si quieres entender lo que pasa en Latinoamérica hoy.