El Real Madrid logró asegurar una importante victoria por 2-1 frente al Celta de Vigo en el estadio de Balaídos el pasado sábado 19 de octubre de 2024. Este triunfo se debe, en gran medida, a las destacadas actuaciones de Kylian Mbappé y Vinícius Júnior, dos de las grandes estrellas del equipo blanco. Con este resultado, el conjunto dirigido por Carlo Ancelotti continúa su impresionante racha de 42 partidos sin conocer la derrota en La Liga, manteniendo así la presión sobre el líder Barcelona.

El partido comenzó con Madrid demostrando su claro dominio desde el primer minuto. La presencia de Kylian Mbappé en el campo fue una inyección de confianza para sus compañeros. El delantero francés, después de haber descansado durante el parón internacional, parecía haber recuperado su mejor forma. Sus rápidas transiciones y su habilidad para romper líneas en el último tercio del campo pusieron en serios aprietos a la defensa del Celta.

Por su parte, el Celta de Vigo llegó al encuentro con dos bajas significativas en su alineación: Iago Aspas e Ilaix Moriba, quienes no pudieron participar debido a sanciones que arrastraban del encuentro anterior frente a Las Palmas. Aun así, el técnico del Celta supo suplir estas ausencias haciendo gala de un planteamiento valiente y organizado, a pesar de los obstáculos. Borja Iglesias y Jonathan Bamba encabezaban el ataque, aunque se notó la falta de la experiencia y calidad de Iago Aspas.

El encuentro se mantuvo cerrado durante buena parte de la primera mitad. Sin embargo, en el minuto 35, Vinícius Júnior logró abrir el marcador con una jugada individual deslumbrante. Desbordó por la banda izquierda, y su velocidad vertiginosa junto con un preciso remate cruzado, dejó sin opciones al portero del Celta, poniendo el 1-0 a favor del Real Madrid.

El segundo tiempo trajo consigo varios cambios tácticos y sustituciones clave. Por el lado del Celta, Tasos Douvikas sustituyó a Borja Iglesias, mientras que Pablo Durán tomó el lugar de Jonathan Bamba. Del lado madridista, Carlo Ancelotti decidió refrescar su medio campo con la entrada de Luka Modric por Federico Valverde, y Rodrygo ingresó por Eduardo Camavinga, una maniobra estratégica que mantuvo el dinamismo del equipo.

El desarrollo del partido se vio momentáneamente interrumpido a causa de las lesiones de Jude Bellingham por parte del Madrid y de Borja Iglesias por el Celta, quienes requirieron atención médica. A pesar de estos contratiempos, el Real Madrid se mantuvo firme, y poco después Vinícius selló la victoria con su segundo tanto del encuentro.

Para el Celta, esta derrota representa una continuación de una amarga estadística que no han podido revertir por más de una década, no logrando vencer al Real Madrid en su propia casa desde el 11 de mayo de 2014. Los aficionados del Celta, aunque decepcionados, reconocieron el esfuerzo y la lucha de su equipo bajo las circunstancias adversas del duelo. Entretanto, la victoria para los merengues supone un impulso significativo en su objetivo de destronar al Barcelona de la cima de la Liga, mientras que la gran actuación de Vinícius y Mbappé invita al optimismo en el bando madridista en esta intensa campaña.

Por último, el entrenador Ancelotti no ocultó su satisfacción con el rendimiento del equipo y, en particular, con el desempeño de Mbappé. «El descanso le ha venido de maravilla y se ha notado en su juego», comentó tras el encuentro. Con el próximo choque de liga a la vista, el técnico italiano espera seguir explotando el buen estado físico y anímico de su plantilla mientras sueñan con tomar el control absoluto de la competición doméstica.